Crónicas de homeschooling cotidiano





“Es curioso como la arrogante noción de que somos dueños del universo nos ha llevado al error práctico de ser esclavos de nuestros instrumentos. No es verdad que, porque hemos inventado automóviles, debamos conducirlos; y porque inventamos cohetes, debamos ir a la luna; o porque inventamos la bomba atómica, debamos aniquilar el mundo. Los grandes debates son siempre sobre cosas simples, se combate por cosas obvias. Nosotros somos los dueños y no los esclavos de las cosas que fabricamos, así como somos servidores y no dueños de nuestra naturaleza” 

John Senior

Hace “siglos” que no escribo en el blog. Uno de mis propósitos para el nuevo año era dejar en un segundo o tercer plano las redes sociales y de momento lo estoy cumpliendo ¡¡¡yupiiiii!!! y además es una de las mejores decisiones que he podido tomar. Habré perdido seguidores y likes, pero he ganado tiempo para dedicarlo a lo realmente importante, que son mis hijos. Las redes no dejan de ser un atractivo y adictivo engaño pues te prometen que solo te van a “robar” unos minutos que es  lo que se tarda en subir una foto a Instagram, y otros pocos minutos para contestar a cuatro comentarios, y al final como no andes “ojo avizor” te roban hasta el alma. 

Como ya sabéis mis lectores habituales, el verano pasado mientras planificaba este curso, entré en “pánico” por diferentes causas (algo muy frecuente en madres, sobre todo si son homeschoolers) y decidí comprar libros de texto después de dieciocho años de abstención de los mismos. Pues así, a grosso modo y después de solo unos meses de “uso y disfrute” de los mismos, me atrevo a afirmar que se puede vivir sin ellos. De hecho tengo en casa un jovencito muy bien educado que apenas los ha utilizado para su formación (tan solo en los últimos años). Se puede recibir una buena educación sin usar libros de texto y os animo a hacerlo. 
Menos mal que fui “lista” y solo compré de matemáticas y lengua. Respecto a los de matemáticas no vienen mal del todo como guía para saber cuales son los contenidos de cada curso. Aunque eso mismo se puede hacer perfectamente consultando Internet y te ahorras un buen dinero que puedes invertir en libros de verdad o en lo que desees. Los de lengua de primaria me parecen muy mediocres, ahora entiendo que los chicos cada vez lean menos y me sorprende que a pesar de la educación que los “pobres” reciben aún quede algún lector. Eligen los textos más simplones, de poca letra y poca”chicha”,como pretexto para que los niños aprendan ortografía, a hacer comentarios de texto, análisis sintáctico. No encuentras ni un solo clásico, sino literatura contemporánea y además con poca calidad. Ya decía el gran Tolkien que:

 “Todos necesitamos una literatura que esté por sobre nuestra medida, aunque no tengamos energía suficiente para ella todo el tiempo. (…) Un buen vocabulario, y una mayor comprensión de las cosas, no se adquieren leyendo libros escritos de acuerdo con el criterio que alguien tenga de qué vocabulario y qué comprensión de la vida son los propios de un determinado grupo de edad. Se adquiere leyendo libros situados por encima del propio nivel”

En los de secundaria ya presentan algún texto con más enjundia, pero como los chavales no tienen base alguna, les debe parecer poco más o menos que “chino” y como además nunca se busca el disfrutar de un libro de manera gratuita, sino que es en plan detectivesco: medir, analizar, encontrar, revisar, estudiar…realmente es toda una heroicidad que algún joven llegue a casa después de la jornada escolar con deseos de seguir leyendo por su cuenta pongamos que el Cantar de mio Cid.
Poema que  estamos leyendo ahora mismo en versión original y es una delicia. Además da mucho juego para comprender la historia de aquella época, repasar geografía española siguiendo los pasos del Cid en el destierro, ampliar vocabulario, hablar sobre los judíos en la Edad Media.
El Cid, aparece como un ejemplo de héroe,  leal al rey,  creyente, que ama profundamente a su familia, valiente,  noble, etc. Nos encontramos ante una persona que es superior a la mayoría de los mortales, pero de carne y hueso. Como diría Nietzche “humano demasiado humano”. No es desde luego un arquetipo.
Y es que la poesía medieval estuvo impregnada de los temas eternos: La vida, la muerte, Dios, el más allá, las hazañas bélicas, el amor y por ello este tipo de lecturas dan para reflexionar y meditar sobre las grandes cuestiones, abarcando la filosofía, la teología y mucho más. No dejan indiferentes. Atrapan la atención.

En unos meses he dejado de lado los libros de texto y llegado a la conclusión que todo lo que habíamos hecho hasta ahora estaba bastante bien. Para seguir un currículo cuya pretensión sea alcanzar el amor a la Verdad, la Belleza y el Bien sigo recomendando una gran cantidad de buenos libros clásicos, dictados para aprender ortografía, alguna copia para mejorar la caligrafía, memorización de poemas y eso si… he incorporado  algo más de gramática por si acaso se tienen que presentar a alguna prueba  en un futuro, que les suene un poco. Pero eso es tan sencillo como cuando estás leyendo un texto hacer algún comentario acerca de figuras retóricas que aparezcan, o de los tiempos verbales, o medir algún verso. Esto de medir los versos debe ser cuestión de vida o muerte, porque no hay examen o prueba en la que no te lo pidan (pero tranquilos que se aprende en un rato). Y por supuesto que esto no significa que la lectura en voz alta sea constantemente interrumpida para preguntarles o puntualizarles: ¡¡¡Chicos, una metáfora, chicos un condicional!!!! Noooooo, porque entonces esos ratos de placer se convertirían en una tortura. Solo  de vez en cuando ja,ja,ja…Ese es el estilo de los libros de texto y de la escuela y no lo vamos a secundar  porque es evidente que no lo están haciendo demasiado bien.

“John Dewey decía que las escuelas son instrumentos de cambio social más bien que de educación, y esa es la razón por la cual Juanito o María no leen, ni escriben, ni sueñan, ni piensan”.

John Senior

Según mi experiencia con eso es suficiente para que comprendan a la perfección cualquier texto (incluso complejos), que sean capaces de relacionar las lecturas entre si, hacer excelentes reseñas de libros (eso se lo pido a partir de los catorce años, antes nada), escribir con corrección (sin faltas de ortografía y sin tener que memorizar reglas), expresarse muy satisfactoriamente de manera escrita (con riqueza de vocabulario, bien argumentado, bien escrito).
Las matemáticas también se trabajan a diario en casa. El “segundo” tiene un profesor particular para todas las ciencias puras y los siguientes lo hacen conmigo. Como el mayor sigue en USA feliz como una perdiz, disfrutando de su año sabático y obviamente no me puede ayudar en casa con sus hermanos pequeños, yo he tenido que poner  “la neurona” a hacer ejercicio y estoy contenta pues me salen los ejercicios antes que a ellos y me lo paso bomba. Otra prueba de que cuando tienes que aprender algo lo aprendes  tengas la edad que tengas. Bueno, de hecho lo “pillo” yo antes que ellos.

Para el resto de las materias estoy intentando trabajar como siempre, pero con algo más de rigor para que no se nos queden demasiadas cosas en el tintero. Y no es solo pensando en futuros exámenes, sino en ellos mismos. No te puede gustar la música si jamás has estado en contacto con ella y lo mismo sucede con la química, la antropología o la filosofía. Estamos utilizando una enciclopedia muy completa que compré  cuando mi hijo mayor tenía meses (previsora que es una) y apenas habíamos utilizado. Lo que hacen los chicos es ir leyendo cada día unas páginas ya sea de geografía, ecología, biología, historia y luego lo que es más importante o les llama la atención lo trabajamos más. Ampliamos información con otros libros, diferentes recursos de Internet, vídeos de YouTube. 
Por primera vez en tantos años de educación en familia estoy teniendo ciertas “dificultades” respecto a la lectura personal de los chicos. El mayor  sigue siendo un lector voraz, se  deja aconsejar y tiene hábito de lectura consolidado. Después el amor por los libros van menguando por edad. Estoy absolutamente convencida de que es el impacto de la tecnología en nuestras vidas. Hace dieciocho años en casa no había “tele” y seguimos igual pero es que ahora la tele es una risión…porque estamos invadidos de artilugios mucho más atractivos que la vieja “caja tonta”.
Me da una pena terrible que mis hijos pequeños se vean privados de la cantidad de lecturas que deleitaron la infancia de los dos mayores, pero tampoco se puede obligar. La lectura o mejor dicho el amor a la lectura no es compatible con la obligatoriedad.

“Hay algunos que encierran a sus hijos o a otras personas en jaulas hechas de exigencias, expectativas y miedos (…) sin darse cuenta de que todo lo que se impone como obligación provoca necesariamente resistencia. En este sentido, toda disciplina que conduce a la inmovilidad y la falta de espontaneidad va en contra de la renovación que identifica a la vida. Al fin y al cabo, es fácil darse cuenta de que no existe nada tan ordenado y seguro como un cementerio”.

Alejandro Roemmers El regreso del joven Príncipe

Me temo que los pequeños no van a tener esa necesidad vital de libros que he tenido siempre yo, que tiene su hermano mayor e incluso el segundo (cuando encuentra libros que le enganchen) y me produce lástima porque la lectura de buenos libros implica un enriquecimiento vital impresionante, además de que no existen ni la soledad ni el aburrimiento si te gusta leer. Pero obviamente que yo sea una “ratita” de biblioteca no implica que ellos deban convertirse en bibliófilos. ¿Será que existe la felicidad más allá de los libros?

Por mi parte sigo leyendo en voz alta los libros que considero “imprescindibles” que cada vez son más ja,ja,ja…y  por otro lado no me da la vida… porque también la lectura en voz alta se va complicando. Sobre esto de los libros “que hay que leer”, voy haciendo listas, que cada vez son más largas, ejem…Os recomiendo  echéis un vistazo al libro de César Vidal, El camino hacia la cultura. Lo que hay que leer, ver y escuchar. Al final del “tochito” hay listas, sobre libros, sobre películas, sobre obras de arte. No son específicas para niños, ni para adolescentes, pero si muy inspiradoras y además los clásicos, clásicos son y la mayoría se pueden, deben leer a cualquier edad.
Soy de la opinión de C.S. Lewis que afirmaba que:

“No merece la pena leer ningún libro a los cinco años a menos que merezca la pena leerlo también a los cincuenta”.

Lo que más me cuesta ahora que son más mayores, es que estén en silencio (los adolescentes y preadolescentes tienen una necesidad real y auténtica de expresarse verbalmente). Intento que  mientras leo trabajen en sus cuadernos (por ejemplo dibujando, haciendo caligrafía), hagan alguna manualidad, jueguen a algo poco ruidoso tipo cubos de rubik, etc.

Por ejemplo esta maqueta de un pueblo medieval que hizo mi “tercer” pollito hace unos meses, me permitió unas buenas horas de lectura con relativa paz.

Y respecto a la lectura personal: cada uno tiene un libro entre manos del cual han de leer cada día un tiempo. El libro lo eligen ellos  de los que tenemos en casa o  de la biblioteca. Yo sugiero  con más éxito unas veces que otras. Y también se sugieren entre ellos.
Y por lo demás disfrutando mucho del aire libre en esta eterna primavera, que tampoco está nada mal. Lo mejor que se puede hacer en un día de esos en los que nada te sale a derechas, que no fluye, que los niños están insoportables, o que nosotros nos hemos levantado un poco así… es salir afuera y si es posible a la naturaleza os aseguro que el día se arregla si o si. Volveréis cansados, oxigenados y mucho más felices que antes de salir. Os dejo con una cita de otra joya que leyeron los mayores hace tiempo por su cuenta y ahora acabamos de terminar la relectura en voz alta para los más jóvenes de la familia.

“Desde entonces me vengo fijando en que esta falta de observación es una triste enfermedad muy común en la naturaleza humana. Hay millares de personas ante cuyos ojos pasan a diario las cosas más maravillosas y sin embargo, viven totalmente ajenos a ellas. Por eso anoto aquí mi compasión hacia tales personas, y les recomiendo que sigan la línea de conducta que tengo adoptada desde hace mucho tiempo, que consiste en forzar la atención sobre todas las cosas que me rodean e interesarme en cierto modo por ellas, sienta o no sienta interés. Recomiendo esto humildemente, pero en serio, porque muchas veces me he encontrado con que la razón de mi indiferencia hacia una cosa ha sido la ignorancia”.

R.M.Ballantyne. La isla de coral




NOTA: De verdad que esto no pretendía ser un libro, solo un post.. pero ya que hoy es miércoles de ceniza no puedo dejar de compartir una frase que leí ayer y me llenó el alma. No se conoce con exactitud la autoría. Hay quien se la atribuye a Chesterton pero parece que más bien la dijo Jean Jaures. Sea de quien sea me gustó y la comparto. Feliz Cuaresma.

“La tradición es la transmisión del fuego, no la adoración de las cenizas”

Hola

¡¡¡Regístrate para no perderte nada de paideia en familia!!!

19 comentarios en «Crónicas de homeschooling cotidiano»

  1. ¡Qué bien que hayas publicado!Si te soy sincera no me lo he leído todavía (me lo guardo para mañana y leerlo tranquila mientras desayuno) pero ya estoy deseando. He visto en las fotos el libro de Cesar Vidal y solo decirte que mi marido lo tiene como libro de cabecera (siempre lo encuentro en diferentes lugares de la casa)… un placer leerte como siempre Paloma. Un abrazo para ti y tu familia.

  2. Hola Paloma.
    Qué bien volver a leerte en el blog.
    Mi hermana me prestó una bolsa de libros de su hijo pequeño que vamos leyendo cada día, libros "modernos" y realmente hay pocos que se salvan.
    Supongo que no es culpa de ella, quiero decir que seguramente no los eligieron ni ella ni sus hijos, serán parte de alguna lista de las que proponen ahora o mandados comprar por el colegio.
    Los que consideramos buenos, los estamos disfrutando. La mayoría no aportan nada, ni bueno ni malo, después de leerlos te quedas como estabas. Qué pena de tiempo desaprovechado. Y luego hay algunos que son terribles, groseros, de mal gusto a veces… ¿realmente eso es lo que leen los niños de hoy y que a la mayoría de los adultos les parecerá normal?
    Puede que nosotros somos los raros, jejeje

    Una pregunta que no tiene que ver con tu escrito, pero que no encuentro en tus entradas anteriores: ¿Qué pasó con la convalidación del título de USA de tu mayor?

    Un abrazo.

  3. Maribel, es así…muchos libros contemporáneos incorporan groserías ¿para qué? Parece como si de esa manera fuesen a atraer a los más pequeños y consiguen el efecto contrario, a parte de que es rebajarles, considerar que nada elevado puede interesar a un niño. Tengo un amigo que siempre cuenta que su hijo era un gran y precoz lector y que dejó de serlo por culpa de los libros obligatorios que tenía que leer en el colegio de la colección Barco de Vapor y me lo creo porque a nosotros nos dan muchos libros y de esa colección que parece la favorita de profesores y se salvan muy pocos. La mayoría son como tú comentas: simplones, anodinos, ni fu, ni fa…Una pena porque además de la pérdida de tiempo es la pérdida de interés por la lectura.
    Respecto a mi hijo mayor no he contado nada porque este año es su año sabático, de "reflexión" y aún no hemos tomado ninguna decisión respecto a su futuro. Cuando sepa algo si "me dejan" lo cuento y si no por privado ja,ja,ja…Que ya van siendo mayores.

    Un beso.

  4. Hola Paloma…gracias por volver a escribir en tu blog. Me consuela mucho tus palabras y experiencias sinceras. Tengo 5 hijos que van desde 13 hasta los mellizos de 6…pero me inquieta la niña de 13…por el tema de la secundaria. Deberia seguir la escuela tradicional o sus preferencias? Confieso que me da un frio en la panza cuando me hablan de la secundaria…que me aconseja? Michele

  5. Michele lo del frío en la panza me es familiar. La verdad es que suele suceder con cada cambio de etapa (el consuelo es que solo sucede con el mayor). Respecto a lo de seguir la escuela tradicional o sus preferencias es algo sobre lo que no te puedo aconsejar. La belleza y riqueza del homeschooling es precisamente que los padres podemos elegir junto a nuestros hijos el currículo que mejor se adapta a nuestras vidas, caracteres, expectativas, etc. Lo que yo hago puedes verlo en el blog pero pienso que a partir de esa edad o un poco más adelante al menos en materias como matemáticas, lengua e inglés deben estar lo más fuertes posibles. Por muchas razones, principalmente de cara a exámenes, acceso a la universidad, escolarización en uno de los últimos cursos de la secundaria…Perooooo eso no significa que tengas que llevar la escuela a casa, precisamente en este último post lo explico. Aunque por otra parte las matemáticas de bachillerato tampoco las puedes trabajar como si fuese un preescolar…son menos coloridas y manipulativas. Quizá hay quien sabe trabajarlas de manera super divertida (yo desde luego no, para eso hay que tener un nivelazo en todos los ámbitos del saber).
    No sé si me he explicado o te he liado más, ja,ja,ja…
    Lo ideal bajo mi punto de vista es que hagan más o menos lo que corresponde a su nivel en las materias que te he comentado pues es difícil que no imposible, ponerse al día de matemáticas en unas semanas y respecto a lo demás que siga sus preferencias, sus hobbies, etc.

    1. Gracias Paloma…casi lloro de la emocion de sentir me compreendida… Es un camino muy solitario algunas veces, pero me encantan tus perspectivas pq colocan verdades a lo imaginario del Homeschool , que parece bonito pero cuesta. Pero ya nos pico la abeja de la curiosidad por aprender fuera de la escuela obligatoria y no hay cura..jejeje ! Vamos por la secundaria o algo parecido!

  6. Hola de nuevo.
    Sólo quiero decirte que acabo de escribirte un correo, espero haber encontrado la dirección correcta. Es sólo una pregunta. Gracias.

  7. Por cierto, me acaban de censurar este post en FB porque infringe las normas comunitarias y no me dejan ni tan siquiera publicar en mi muro. Si alguien considera en qué he podido ofender a la comunidad le agradecería cualquier comentario. Muchas gracias.

  8. Marvan no puedo publicar nada en mi muro. No se puede acceder a ninguna publicación anterior que te mande al blog. Nadie puede poner un enlace a este blog en FB ni en Instagram ¡¡¡estoy anonadada!!!

  9. ¿Han censurado tu blog? Podría ser que alguien te haya denunciado (bueno, no a ti, sino algo que hayas puesto), aunque no entiendo por qué. Podrías preguntar a facebook directamente.

  10. Paloma! Qué gusto leerte!
    Pero que pena que tenga tan poco tiempo… Entre mis peques de 3, 2 años y 5 meses se me escurre el tiempo de una manera increíble!

    Quisiera contactar contigo por privado. Crees que es posible?

    Un saludo

  11. Hola Paloma

    Acabo de descubrir tu blog y me emociona todo lo que estoy leyendo. Hemos pasado por unos años de unschooling y ahora que mis dos hijas tienen 10 y casi 12 años respectivamente creemos como familia que es el momento de incorporar más conceptos. Voy a ir leyendo tus entradas y me surge una duda, ¿hay manera de suscribirme a tu blog? No quiero perderme nada 🙂
    Por cierto, la enciclopedia de la que hablas, ¿me podrías dar el nombre?

    Mil gracias!!

  12. Hola Pili, en la columna de la derecha arriba del todo te puedes suscribir. Nunca se me había ocurrido, gracias por la sugerencia. Respecto a la enciclopedia me imagino que te refieres a la Enciclopedia del Estudiante de Santillana. Es muy completa, yo la compré hace años, a lo mejor ahora la puedes conseguir a buen precio de segunda mano. Me encanta que te ayude el blog. Un beso.

Responder a Pili Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Información básica sobre protección de datos
Responsable Paloma Estorch Ruiz +info...
Finalidad Gestionar y moderar tus comentarios. +info...
Legitimación Consentimiento del interesado. +info...
Destinatarios No se cederán datos a terceros, salvo obligación legal +info...
Derechos Acceder, rectificar y cancelar los datos, así como otros derechos. +info...
Información adicional Puedes consultar la información adicional y detallada sobre protección de datos en nuestra página de política de privacidad.