cuando hace la calor,
cuando los trigos encañan
cuando canta la calandria
y responde el ruiseñor,
cuando los enamorados
van a servir al amor;
sino yo, triste, cuitado,
que vivo en esta prisión;
que ni sé cuándo es de día
ni cuándo las noches son,
sino por una avecilla
que me cantaba al albor.
Matómela un ballestero;
dele Dios mal galardón.
Salvador (7 años)
Que gusto encontrarte! Nosotros tampoco llevaremos a Zoë al cole, la ‘educaremos nosotros’
Os seguiré 😉
Bienvenidos!!!
jeje, gracias 😉