Cuando solo me quedaba un cuatrimestre para finalizar la carrera, en una de las asignaturas que elegí por una cuestión meramente practica, me encontré con un profesor que desde el primer momento me pareció una persona maravillosa y con una calidad humana y un rigor intelectual que muy pocos seres humanos poseen . Es una de estas veces en la vida que sabes que tienes ante ti, un alma gemela aunque tenga algunos años más y muchísima más sabiduría. Se me pasaban las clases volando, todo era claro, comprendía lo que nunca había entendido, disfrutaba leyendo los libros que recomendaba. Durante aquellos meses abandoné el resto de las asignaturas para dedicarme a profundizar en la que él impartía con tanto entusiasmo.
El último día del curso, se despidió cordialmente de todos nosotros y nos comentó con una mal disimulada tristeza, que aquella era su última clase….¡después de tantos años de docencia en esa vieja universidad!
Desde el primer día, me moría de ganas de ir a su despacho, hablarle de lo que me había supuesto existencialmente conocerle y en aquel momento supe que tenía una oportunidad única de darle las gracias por tantas cosas…haber estado ahí, por haber dedicado toda su vida a la enseñanza, por sus clases magistrales, por su saber, por el amor que su persona irradiaba, por el respeto con el que nos trataba….Y me acerqué a la mesa y le di la mano y sonreí tímidamente y poco más…La cuestión es que no me atreví a decirle nada, me dio demasiada vergüenza,¿qué iba a pensar de mi? ¿se reiría? Me sentía tan pequeñita a su lado…
Pero al llegar a casa por la noche, no podía aguantar y me sentía fatal por haber callado, entonces recordé que el primer día de clase nos había dado su teléfono y su fax y ni corta ni perezosa me decidí a mandarle unas líneas (suena prehistórico lo del fax ¿no?)
A los pocos minutos recibía otro fax de respuesta….¡de mi maestro!, en aquél momento gané un amigo, pero lo más increíble es que según me ha dicho muchas veces, jamás ha olvidado esas palabras mías, pues aquél había sido un día especialmente difícil para él. Desde entonces me he vuelto mucho más espontánea y cada vez que voy a una conferencia o conozco a alguien que me parece interesante, no dudo en decírselo. A veces tendemos a ver a las personas que admiramos, como superiores y nos cuesta imaginar que también se puedan sentir solos, tristes o nostálgicos. O sencillamente sentirse un poco más felices, con una palabra salida del corazón.
Y todo este preámbulo, es para decir que hace unos meses trasteando por Internet, me encontré con el método natural de aprendizaje de LLPSI creado por Hans Henning Ørberg. En cuanto vi las páginas de muestra de este método tuve la seguridad, de haber hallado una joya e inmediatamente hice el pedido de todo el material. Enseguida empecé a trabajar con “Familia Romana” leyéndoselo a los niños y desde entoces no dejo de sorprenderme cada vez más, de la riqueza de este método para aprender latín. Y de preguntarme la razón, por la que no lo utilizan todos los profesores en sus aulas. La cuestión es que pensé en varias ocasiones en escribir al autor, diciéndole que utilizaba su método con niños pequeños y de una manera muy satisfactoria, solo que por falta de “tiempo” (la eterna y absurda excusa ) nunca llegué a hacerlo. El pasado 17 de Febrero fallecía Hans Henning Ørberg y siento profundamente, no haber podido darle las gracias por su hermoso trabajo, es una de esas cosas de la vida, que me va a costar perdonarme, aunque me consuelo pensando que “desde un bello lugar” sin duda alguna, sonreirá cada vez que vea a los niños con los ojos como platos al leerles su “novela ” y cuando les oiga entre risas y jolgorio jugar con las frases que van aprendiendo, y esos comics llenos de faltas pero escritos totalmente en latín…..o cuando me llaman…. ¡Mater veni!
¡¡¡Muchas gracias profesor!!! Este sencillo blog, desde estos momentos…queda dedicado a Vd.
“En esta provincia, cuyos habitantes se dicen ser más romanos que los romanos mismos, yo, que hablo un idioma bárbaro, tengo la presunción de injerirme en la discusión de la enseñanza del latín, la lengua de los antiguos romanos. Pero es que ha llegado a mis oídos que la mayoría de los alumnos españoles se desentienden del latín o han dejado por completo de saber latín-lo que es alarmante, pues según el diccionario “saber latín” quiere decir “ser astuto o muy inteligente”….”
Conferencia pronunciada por Hans Henning Ørberg, en el marco de las “I Jornadas de Culturaclásica.com” en Almuñecar, 2005
Hola Paloma,
no sabía que Hans Henning Ørberg había muerto. Es una lástima… deja detrás suyo tantas cosas que han llegado (y llegarán) a tanta gente que seguro que estará siempre presente entre nosotros. Le agradezco muchísimo habernos descubierto otra forma de aprender latín! Un abrazo!
Paloma, me dejas ahora con curiosidad por conocer a este hombre.
Muy cierto lo que dices sobre la gente 'importante'. El otro dia entré a el blog de una conferenciante sobre el metodo de Charlotte Masonque educa a seis, los dos mayores ya titulados con honores, y le dejé un comentario cuando veo que me escribió, se hizo seguidora, y me dijo BRAVO por tu tarea de traducir CM al castellano. Y yo no pensaba que alguien tan 'ocupado' tuviera un minuto para pasearse por mi 'vida en mis blogs'.
De veras que siento que no nos podamos ver y tomar un cafe para cambiar impresiones sobre la vida y la educación.
Bueno, te sigo por aqui, que me he vuelto a releer A Well Trained Mind por Susan Wise Bauer y uno de tus comentarios del latin parece salido de su libro.
Qué post tan bonito Paloma! es cierto lo que cuentas. Yo a nivel más mundano, soy de las que digo: Qué guapa estás hoy o qué bonitos pendientes,… la gente pensará que soy una ñoña pero me sale así y lo mejor es que tengo una peque que es igual y le dice a la gente "que bonita estás" y yo me derrito claro 🙂
Besitossssss
Multas per gentes et multa per aequora vectus advenio has miseras, magister, ad inferias…
El maestro Oerberg es uno de los pocos hombres (y ya son pocos) que merecen verdaderamente ese título. Yo fui un estudiante terrible de latín y griego en mi Bachillerato… Sin embargo, hace unos años, descubrí su Lingua Latina per se illustrata y me deslumbré. Me inoculó un amor por el latín, por sus matices, su poesía, su encanto lacónico, que no siento por ninguna otra lengua. Y lo mejor de todo: me abrió las puertas de los últimos 2000 años de nuestra civilización. Ese bárbaro cimbrio, sabio y paciente, nos ha enseñado latín mucho mejor que nadie.
Et in perpetuum, magister carissime, aue atque uale.
Yo también le estaré siempre agradecida África, lástima no haber conocido antes este método y pensar que tiene más de cincuenta años!!!
Silvia pues si que me gustaría poder tomar un cafetito juntas o mejor aún un "mate", pero estamos un pelín lejos ¿no? De momento va a tener que ser virtual…
Besos.
Meninheira es que los niños son espontáneos y dicen lo que sienten, ya sabes el cuento de "El traje nuevo del emperador". Y con la edad te vas volviendo un poco así, ja,ja…como un niño.
Besiños.
Mr. Peel muchas gracias por tu comentario, es muy bonito y tienes muchísima razón.
Me consuela pensar que no fui la única alumna pésima de latín en el bachillerato, uf!!
Un cordial saludo.
Paloma eres una brujaaaaaaaaa hahahaha
¿Te crees que no me he dado cuenta de que me has llamado vejestorio? malvadaaa!!! XDDDDDDDD
Jo Meninheira, es que a estas horas y a "estas edades" donde mejor se está es en la cama, ja,ja..!!!
De verdad que no quería llamarte nada que no te corresponda…¿mejor dejo de escribir?
Besiños…
Paloma, a estas edades y a cualquiera, en dónde deberíamos estar ya! es en la cama!! :DDDDDD Bueno, yo digo en la cama pero en realidad y debido a mi extrema juventud, dónde debería de estar es en la discoteca claro XDDDDDDDDDD
(Sólo de pensarlo me da algooooo)
Muchos besiños, me voy a la "disco" que ya no puedo más 🙂
No puede ser… yo ya me prohibo salir por la noche, pero claro como por el día no podemos trabajar con los niños…aprovechamos cuando todos duermen (lo cual es un decir, ya sabes…)
Pero ayer me fui a la cama con una sonrisa de oreja a oreja, con lo de la vejez y demás…que risa!!!
Muchos besos y a cuidarse…ya sabes ¿se llaman achaques?